martes, 9 de junio de 2015

lunes, 8 de junio de 2015

Estrés y alimentación


El estrés es una reacción del cuerpo frente a una amenaza o peligro. Se produce una liberación de hormonas que hacen que nuestro cerebro permanezca alerta de manera que los músculos se tensan y aumenta la frecuencia cardiaca. Todo el mundo ha experimentado esta sensación alguna vez y normalmente es a corto plazo ya que disponemos de la capacidad de manejar la situación que lo provoca y ponerle fin. Es bien sabido que el estrés mantenido durante un largo periodo de tiempo puede perjudicar la salud dando lugar a presión arterial alta, insuficiencia cardiaca, diabetes, obesidad, depresión, ansiedad, problemas menstruales y en la piel. Hay varios estudios que han demostrado que el estrés implica la aparición de alteraciones en la alimentación, por lo que he considerado adecuado realizar esta entrada.

martes, 2 de junio de 2015

Rissotto de champiñones


Ingredientes (4 personas):

300g de arroz.
1 litro de caldo de verduras (casero).
300g de champiñones.
1 cebolla.

1 ajo.
Queso parmesano rallado.

Aceite de oliva.
Sal.

lunes, 1 de junio de 2015

Las propiedades de los frutos secos


Los frutos secos son un alimento que se caracterizan por su alto contenido energético y en grasas, por lo que durante muchos años la tendencia de la población era evitar consumirlos, sobre todo aquellas personas preocupadas por su estado de salud y que no quieren aumentar de peso. Conviene tener en cuenta que el tipo de grasas que contienen son mono y poliinsaturadas, que son beneficiosas en la mejora del riesgo cardiovascular. Por este motivo, los Dietistas-Nutricionistas recomendamos ingerir un puñado de frutos secos (aprox. 20g) diario, incluso en dietas de adelgazamiento. También se caracterizan por su alto contenido en fibra, potasio y vitamina E. Apenas contienen azúcar y la cantidad de proteínas son variables, rondando los 15-20g por cada 100g.

Con esta entrada, mi objetivo es hacer referencia a distintos artículos científicos sobre los efectos beneficiosos que suponen los frutos secos respecto a nuestro estado de salud. Hay estudios genéricos y otros específicos como es el caso de la nuez, las almendras, los pistachos o las avellanas.

jueves, 28 de mayo de 2015

La alimentación en el embarazo


El embarazo es una etapa natural y transitoria en la vida de la mujer que dura entre 37 y 42 semanas. La alimentación es uno de los pilares fundamentales en el desarrollo adecuado del feto y buen estado de salud de la madre. Por lo que hay que procurar comer saludablemente tanto antes, durante como después del embarazo. La única diferencia en la alimentación respecto a las mujeres sanas de la misma edad y que no esperan tener un niño, es la cantidad de determinados nutrientes ya que tienen un papel fundamental en el correcto desarrollo cognitivo del feto.

Antes de comentar cuál la alimentación idónea durante esta etapa de la mujer, quisiera hacer referencia al peso. Previamente, es importante que la madre tenga un peso normal (IMC=18,5-25Kg/m2) para garantizar el éxito del embarazo. En caso que la madre tenga un peso excesivo (IMC>25Kg/m2), es recomendable una pérdida de un 5-10% del peso en un periodo de 6 meses. Durante los 9 meses de duración de esta etapa, la ganancia de peso varía en función del peso de la madre. El instituto de medicina de Estados Unidos (IOM) en base a un estudio realizado en 2009, elaboró una tabla orientativa que veis a continuación.

martes, 26 de mayo de 2015

Ensalada de espinacas


Una propuesta de plato único muy refrescante y a todo color. Por un lado, nos aporta una cantidad considerable de fibra debido a las espinacas, el tomate, las fresas y la manzana que también son ricos en vitaminas y minerales. Entre los más destacados, se encuentran los carotenos (provitamina A) que les confieren su color característico tan vivo y que contribuyen a un buen mantenimiento de la piel y las mucosas. También es un plato rico en potasio y vitamina C que se caracteriza por su poder antioxidante y favorece la absorción del hierro. También he añadido un puñado de pipas de girasol debido a su contenido en ácidos grasos poliinsaturados indispensables en la prevención del riesgo cardiovascular. El queso que he utilizado es de cabra aunque en pequeñas cantidades ya que contiene grasas saturadas y es rico en sodio, por lo que no es recomendable para personas con el colesterol elevado e hipertensión. Puede sustituirse por un queso fresco bajo en sal. También contiene calcio.