viernes, 15 de enero de 2016

“Los mitos de los alimentos”: Reflexión de una Nutricionista

El pasado martes 12 de enero se emitió el programa Los mitos de los alimentos. Estaba encabezado por Alberto Chicote y consistía en comprobar científicamente si muchas de las creencias populares acerca de los alimentos eran ciertas o no. Podéis verlo en este enlace.  ¿Quién no ha oído alguna vez en su vida lo de: Bébete rápido el zumo que se le van las vitaminas o la miga del pan engorda más que la corteza o un vaso de leche ayuda a dormir, etc. Solo se trataron algunos, a mí se me ocurren muchos más. Aun así, el programa dio de sí: fueron nada más que 2 horitas de emisión en prime time.
Vayamos por partes. ¿Algo positivo? Creo que es el primer programa en televisión en el que han intervenido expertos, aunque no hayan contado con Dietistas-Nutricionistas (Graduados o Diplomados en Nutrición Humana y Dietética) o Dietistas (Técnicos Superiores en Dietética) y pienso que ha sido un gran fallo. Y si, es cierto que han llevado a cabo experimentos diversos pero ha faltado profundizar aún más. Lo comentaré más adelante. Aparecieron catedráticos de química y también de nutrición y bromatología, incluso de fisiología, médicos endocrinos, neurólogos y neurofisiólogos. Esto es lo que más nos molesta a los que nos hemos dedicado 2 o 4 años de nuestra vida a estudiar Dietética y Nutrición. ¿La población nos conoce? ¿Y los del programa? La pura realidad es que no. Sí lo que queríais es tener audiencia, felicidades. En redes, había comentarios de todo tipo. Y lo que más llamó la atención, al menos a mi colectivo y los pocos que nos conocen, fue esto:




No me extraña que tengamos intrusismo!!! Por lo menos, nuestra profesión existe desde hace unos 20 años o un poquito más. Entonces, me pregunto: ¿Por qué hay gente que sigue acudiendo al médico o a los enfermeros? En Enfermería solo hacen una asignatura de 6 créditos, nada más y en medicina más de lo mismo. Los médicos, si están especializados en endocrinología y nutrición aún saben, pero ¿el resto? ¿Creéis que es suficiente en tan poco tiempo ser un experto? Nociones básicas y punto. Y luego otra cosa, en España, la Sanidad Pública nuestra figura no está contemplada y son las enfermeras las que intervienen, eso sí, nada de personalizar las dietas, con imprimir unas recomendaciones con ejemplos ya es suficiente. Y esto es lo que genera confusión en la población. 

Vayamos ahora a comentar los mitos.
  • ¿Engorda más la miel que el azúcar? Falso. Se comprobó mediante una reacción de combustión. Cuanto mayor fuese la llama, más calorías. La diferencia es apenas de 100kcal (300 vs 400) y se debe a la cantidad de azúcares de absorción rápida (sacarosa) que es mayor en el azúcar como tal. Y solo con las Kcal no es suficiente para decir que un alimentos engorde o no, depende de la frecuencia de consumo. Y es que según la OMS, la dosis diaria recomendada es de 10g/día (5g si vuestro objetivo es reducir el riesgo de padecer obesidad y/o diabetes).
  • Bébete el zumo rápido que se le van las vitaminas. Hace referencia a la vitamina C. Falso. Realizaron un análisis en el laboratorio en distintos periodos de tiempos (inicial, 3, 6 y 12 horas tras exprimir las naranjas). Como podéis comprobar en la imagen que tenéis a continuación, los niveles se mantienen. (foto) Lo que sucede en realidad es que la vitamina (en forma de ácido ascórbico) se oxida dando lugar a ácido dehidroascórbico, que sigue manteniendo las mismas propiedades. Nos lo cuenta Julio Basulto aquí


  • Comer zanahoria, ¿te ayuda a ponerte moreno? Falso. Las zanahorias se caracterizan por su color naranja debido a la gran cantidad de betacarotenos (provitamina A). El experimento consistió en comprobar si el consumo de 500g diarios y crudas (aprox. 8 zanahorias) en un periodo de 10 semanas te hacía poner más moreno. Se hizo en 2 gemelas (1 era control). Eran 2 fases: sin tomar el sol y con rayos UVA. Sí es cierto que la piel se volvió más anaranjada pero porque los carotenos se depositan en la piel y se tiñe. No influyen en la producción de melanina (sustancia implicada en el moreno). Primero de todo, la cantidad de consumo es exagerada. Y en segundo lugar, ¿por qué ponerse moreno con la dieta? Yo, como profesional os recomendaría tomar zanahorias pero por las propiedades de los carotenos que ayudan a proteger la piel y las mucosas e intervienen en el proceso de la visión.
  • ¿La miga engorda más que la corteza? Falso. Se separó la misma cantidad de miga que de corteza y se deshidrataron. Así que, cuanto más peso, más calorías. La diferencia fue de 8g (19g en corteza y 11g de la miga). ¿Y ahora qué? ¿Todos a comprar pan sin corteza? Anda, dejaros de tonterías y a comerlo entero. Tampoco es que sea un alimento imprescindible. Jessica Hierro nos comenta las diferencias entre distintos de panes en este artículo.
  • ¿Comer helado nos hace más felices? Falso. Yo creo que está mal formulada la pregunta. Lo más conveniente sería: ¿Comer helado nos da placer? La felicidad es un concepto abstracto y la definición depende de cada uno. No a todo el mundo le hacen feliz las mismas cosas. Se valoró mediante estímulos sensoriales y visuales (agua y helado de chocolate). Lo que sucede es que el azúcar estimula la región del cerebro relacionado con el placer. Cuidado, el exceso no es bueno. Puede generar adicción, tal como muestran varios estudios. Y también contiene teobromina que es estimulante. Y otra cosa, tampoco es bueno refugiarse en la comida para ser felices. 

  • Los alimentos light, ¿no engordan? Se definen como aquellos a los que se le ha reducido en un 30% su valor energético o de algún nutriente en concreto (normalmente azúcar o grasas). Para eso, debe existir la versión “entera”. 4 voluntarios ordenaron de mayor a menor distintos alimentos/productos según contenido calórico. Y aquí es donde fallaron porque de forma general se asocia light con bajo en calorías (no es lo mismo). Por eso, la mejor opción es revisar las etiquetas y comparar entre las 2 versiones. Y lo más fácil, olvidaros de ellos y moderar o evitar el consumo de alimentos insanos. 

  • ¿La carne alimenta más que el pescado? Falso. Nutricionalmente, son similares, sobretodo en cuanto  a proteínas. Por ejemplo, 100g de pechuga vs 100g de lubina. 21,7g de proteínas vs 20,4, respectivamente. 3 g de grasas vs 2,1 y cantidades variables de vitaminas y minerales. El aporte calórico tampoco es muy distinto (113 vs 100 kcal). Así que la recomendación es priorizar el consumo de pescado ya que el perfil lipídico es mejor y se relaciona con la prevención de determinadas enfermedades como algunos cánceres o hipercolesterolemia. 


  • Un vaso de leche, ¿nos ayuda a dormir? Falso. Se asocia al contenido en triptófano, un aminoácido que ayuda en la producción de melatonina. La cuestión es que no es suficiente con un solo vaso, se necesitarían muchísimos más. Además que hay alimentos que contienen dosis mayores de triptófano. Mirad el artículo de Juan Revenga. Lo que se dijo es que hay que seguir una misma rutina.
  • La fruta, ¿mejor con piel? Verdadero. Maticemos, porque en redes había comentarios exagerados y sin sentido, aunque en realidad se sobreentiende. Son frutas que se pueden comer con piel como manzanas, peras, ciruelas y albaricoques. Se observó que la piel contiene el doble de fibra que la pulpa. En cuanto a vitamina C, el total son 4,6 mg (4 de la pulpa y 0,6 de la piel. Así que es mejor tomarla con piel que sin debido a la fibra para favorecer el tránsito intestinal. 



  • No tomar nada después de la leche. Falso. El ácido, ya sea de un alimento o del estómago, produce la precipitación de las proteínas. También nos sirve para demostrar que las dietas disociadas no tienen ningún sentido. Además, ¿conocéis algún alimento que solo contenga un único nutriente?
  • Las lentejas, ¿son el alimento con más hierro? Falso. Primero, se diferencian 2 tipos de hierro: hemo (origen animal) y no hemo (origen vegetal). Segundo, el grado de absorción es menor en el caso de los vegetales. Tranquilos, puede mejorarse mediante la ingesta de vitamina C. Y como todo, hay nutrientes que lo dificultan como el calcio, los taninos (café y te), los fitatos y los oxalatos (cereales y verduras de hoja verde). No es que las legumbres, no contengan hierro sino que es menor a los de origen animal, sobre todo entre los que se eligieron. Las fuentes vegetales de hierro son las legumbres, los frutos secos y los cereales integrales remojados o germinados (Fuente: Cocina Vegana de Lucía Martínez y Virgínia García).
  • ¿Hay alimentos afrodisiacos? Falso. Los estudios que hay no son concluyentes ni de suficiente calidad. (Julio y Juan le dedicaron un artículo). Observaron si tras comer ostras, trufa negra y chocolate con fresas y canela se producía un aumento de a temperatura corporal y de frecuencia cardiaca.


En conclusión, hay que usar el sentido común y recurrir a profesionales cualificados, un Dietista-Nutricionista o un Dietista y un endocrino si los 2 van de la mano porque lo mejor es un equipo multidisciplinar para resolvernos nuestras dudas y no creernos nada de lo que nos cuenten o leamos en cualquier texto sin fundamento. Ah, y si queréis alguno consejillos más, echad un vistazo al post de Bárbara Sánchez.    

2 comentarios:

  1. me ha parecido muy interesante esta aportación. los mitos cuesta cambiarlos. yo tengo una pregunta, si uno sale a correr 10 km, a las 9 de la mañana , que aconsejarías desayunar como tentempié si depues tienes previsto almorzar un bocata cuando llegues a destino?

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    1. Por ejemplo, puedes tomarte un vaso de leche (con el café) + 1 tostada con queso fresco/pavo o bol de muesli con pasas + 1 plátano o fruta mediana o un yogur con fruta troceada con nueces picadas o la pieza de fruta con puñado de frutos secos o 2-3 dátiles. Tienes muchas opciones. Yo te recomiendo que el lácteo o bebida vegetal los incluyas y lo combines con la fruta o un poco de pan y como opcional los frutos secos.

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