jueves, 13 de octubre de 2016

Postres que aparentan ser sanos





Esto no es más que una llamada de alerta a los fanáticos del dulce y promotores en revistas, blogs y programas de televisión. Como apasionada de la cocina que soy y la profesión por la cual dejaría todo, estoy cansada de ver titulares de: Postres bajos en calorías que apenas engordan o repostería más sana. Que yo nunca he sido sabores muy pronunciados pero al leer tales mensajes, se me saltan las lágrimas, aunque no de la emoción. Tan solo con echar un ojo a los ingredientes ya se intuye que no son lo que parecen. Ahora os lo cuento.

Todo el mundo sabe que el azúcar engorda y que si te tomas un pastel o un croissant, todavía más. Pero claro, la cultura gastronómica que tenemos está basada en lo tradicional y casero, por lo que la repostería no puede faltar. Claro que se pueden comer en alguna ocasión pero no de por vida y a todas horas. Sabemos también que los diabéticos no pueden abusar de tal componente. Por eso, se descubrieron los edulcorantes como la sacarina, el aspartamo (uy, ¡qué miedo!), hará unos añitos la stevia y detrás el jarabe de arce, el sirope de maíz y ya por último, el azúcar de coco. Claro que sí, todo muy natural. Y como dicen que son sanos, a utilizarlos como si nada. Pues, perdonad que os agüe la fiesta, siguen siendo hidratos de carbono simples. Así que el riesgo de obesidad sigue aumentando. ¿Por qué los consumimos? El motivo principal es que estamos rodeados de alimentos ultramegaprocesados y claro quién se resiste. Otro aspecto a destacar es que también existe la costumbre que todas las comidas principales deben acabarse con un buen postre o el famoso refrán de “a nadie le amarga un dulce”. O lo de si luego lo quemo en el gimnasio o corriendo.


Además, me he fijado que sigue arraigado el mito de cuantas menos calorías, mejor. No es así, señores. Cualquier otro nutricionista os lo puede confirmar. Así que mi recomendación es que los sigáis en redes, leáis sus libros que luchan contra la desinformación y echéis un vistazo a los blogs. Hay muchos, algunos son Julio Basulto, Juan Revenga, Lucía Martínez, NorteSalud Nutrición, Palmeras de fruta, dietista enfurecida, Bárbara Sánchez, Ana Amengual (Biografía de un plato), Nuteco, Teresa Hernáez, Yolanda Anfrons, Eli Gallego, María Neira, Rebeca Pastor y podría seguir pero el post sería demasiado largo. Y da lo mismo si han estudiado ciclo superior o todavía están formándose. Buscad por Twitter, os sorprenderéis. Y luego hay otros sanitarios que también lo demuestran como Luís Jiménez (Centinel), Carlos Casabona, Cristina Andrades, 24 zanahorias, Creativegan, Gloria Colli, Raquel Blasco, etc. Com habéis podido ver, la lista es larga.

Y otra cosa de la que me he dado cuenta es que también se difunde que si añades fruta es más saludable. Es que es para compensar ya que si tienes una cosa mala y le añades una buena pues el efecto ya no es tan malo. ¿En serio? Va a ser que no.

Así que hacer una milhojas de melocotón y requesón y añadirle 4 cucharadas de miel y otra de azúcar no es sano, tampoco añadírsela a una macedonia de frutas (que ya llevan azúcar que junto a la fibra se absorbe más lentamente), ni preparar una crema de melón y coronarlo con un helado, menos aún un cóctel de piña y coco a base de zumo, o comprar una masa de tortitas en el super y bañarla en dulce de leche igual que para nada lo es un bizcocho hecho con sirope de arce. Estos son algunos ejemplos que he encontrado.


Y por último, todo esto es para que reflexionéis. Que no todo vale en este mundo y hay mucha desinformación. Y si que pueden hacerse postres sanos, utilizando plátano o dátiles para endulzar pero eso no quita que no sean calóricos. Pero hacerlo de esta manera ya es un avance. Hasta la próxima!!! 

3 comentarios:

  1. Hola Silvia. Relacionado con esto, aunque no demasiado, tengo una duda.
    Desde hace poco estoy intentando incorporar a mi dieta más fruta y verdura cruda, aunque esta última quizás no en tanta cantidad como la primera, porque ya era consumidora habitual de ensaladas. Pero la fruta me cuesta bastante habituarme (reconozco que me aburre un poco tener que ir con ella a mordiscos, y el tupper no es viable), así que para almorzar en el trabajo hago un batido de entre dos o tres piezas de fruta y/o verdura. Nunca lo cuelo, porque mi intención es aprovechar también la fibra. Y nunca lo endulzo, eso lo tengo bastante interiorizado.
    La pregunta en cuestión es: ¿te parece saludable este tipo de batidos? ¿O estos alimentos sería mejor no comerlos batidos para "hacer trabajar el estómago"? ¿Se pierden propiedades de los alimentos al prepararlos así?
    Gracias por los consejos, sobre todo para los que estamos empezando a cambiar los hábitos alimenticios, porque ayudas muchísimo.
    ¡Un saludo!

    ResponderEliminar
  2. Hola Elisa, no hay problema en batirlos. De forma general, es mejor tomarla masticada ya que tardas más en comerla, los nutrientes se asimilan progresivamente y te da una mayor sensación de saciedad. Te aconsejo que al meno de las 2-3 piezas de fruta diarias, 1-2 sean enteras. Puedes preparar una brochetas, pasarla por la plancha y ponerle canela (opcional o añadirla troceada en el yogur. Y si lo comparas con un zumo, siempre es más saludable el batido ya que conservas la fibra, tal como me has comentado. Una opción que te propongo es hacer un bizcocho a base de plátano y huevo, y si quieres una cucharadita de cacao.
    ¿Qué ocurre con los zumos? No llevan la fibra, le añaden azúcar o tiene más cantidad por el núm. de frutas utilizadas. Lo que sucede es que se absorbe muy rápido y aumentan los niveles de glucosa en sangre y al cabo un rato volvemos a tener hambre. Espero haberte ayudado.

    ResponderEliminar
  3. Manténgase conectado de forma no parada gracia nuestros paquetes ofrecen créditos entre
    individuos disponible día y noche tiene una tasa de interés del 2%
    A partir de 191 euros de correo electrónico solo. contacto: duroumarcel@gmail.com

    ResponderEliminar